El Sistema Meteorológico Nacional de México ha proyectado que en 2024 habrá cinco olas de calor concentradas entre marzo y julio, lo que incrementará la sequía y la necesidad de energía para sistemas de aire acondicionado.
Además, se espera un verano más caluroso que el anterior, con temperaturas que podrían superar los 40 grados Celsius en algunos puntos del país.
A pesar de estas circunstancias, se prevé un crecimiento de la energía solar para sistemas de generación distribuida, con una mayor expectativa de aumento en la segunda mitad del año, una vez transcurridas las elecciones mexicanas.
Los precios de los módulos solares han bajado considerablemente en medio de una demanda por energía solar creciente, y hogares e industrias buscan disminuir su dependencia a la red eléctrica pública, disminuir costos y garantizar un suministro de energía confiable, “por lo que adoptar energía solar es una inversión”, destacó el gerente de servicio para América Latina de la compañía Solís.